Daphne regresa del balneario con su magnífica figura de siempre. Niles ha estado planeando un reencuentro de lo más apasionado, pero lo que consigue es que ella se enfade muy seriamente con él por menospreciar a la psiquiatra que la estuvo tratando en el balneario. A partir de ahí, Frasier intenta ayudar a Niles, haciéndole ver que realmente ha estado idealizando a Daphne todos estos años.