En la década los años cincuenta, ser mujer era una carga difícil de llevar. Eran tiempos donde las mujeres vivían reprimidas, los hombres tenían todas las oportunidades y el matrimonio era una imposición. Esta era una época donde amar era temer. Alicia Benítez, una líder de la lucha feminista, sueña con cambiar las injusticias y anhela estudiar en la universidad, pero será obligada a casarse con Pascual Ordóñez, un despiadado líder conservador del pueblo Güicán y jefe de la policía secreta. La situación no puede ser peor para Alicia; la joven había tenido que abandonar a su novio, al cual se le había entregado por amor, y por ser "impura" se enfrentará al maltrato de su esposo. Durante un largo año, Alicia deberá pagar con humillaciones y maltrato psicológico y físico el no haber llegado virgen al matrimonio.