Tras ampliar los sensores de la Destiny, la tripulación descubre que todos los stargates de la galaxia están rodeados de naves portadoras de drones. Este hecho imposibilita que la tripulación pueda reabastecerse de energía y alimentos. Cuando su primer plan falla, Eli propone que la tripulación entre en las vainas de éxtasis de la nave para que ésta viaje por toda la galaxia durante tres años y así evadir a los drones.