Hitoka ya sabe que tiene las puertas abiertas para ser la mánager el equipo de voleibol, pero todavía no tiene muy claro si quiere unirse porque no es un deporte que le entusiasme demasiado y la falta de apoyo de su madre tampoco ayuda mucho. No obstante, el mero hecho de estar al lado de Hinata hace que cambie de parecer.