Manu sigue enfadado porque Natalia ha decidido hacer el trabajo de educación sexual con Peter. Por fin quedan pero, para decepción de la chica, el tatuaje resulta ser muy común y no le va a servir como pista en la muerte de su hermano. El grupo de baile sigue decidido a apuntarse al concurso pero tienen grandes problemas para juntar dinero porque tienen que pagar también la multa por destrozar el bar donde se pelaron con Manu y su grupo. Diego decide presentarse al puesto de profesor de baile, pero hay mucha competencia. Él es pesimista y no cree que consiga el trabajo. Más tarde, es abordado por Montero, que le dice que quiere recobrar lo que se quedó Sergio antes de morir. Diego trata de hacerle ver que él no sabe dónde está; pero Montero es implacable: quiere lo suyo de vuelta y si no, podría acabar teniendo un "accidente".