Eddie toma prestada una grabadora que pertenece al padre disc-jockey de uno de sus amigos. Herman graba una versión de DRY BONES, acompañándose en la guitarra. Al día siguiente, el disc jockey reproduce la canción en su programa de radio y se convierte en un éxito instantáneo. Herman se identifica como el cantante misterioso y rápidamente se convierte en una celebridad ególatra aspirante. El abuelo viene al rescate con sus Nothin 'Muffins.